Buscador



Buscador (Rivas 2008) 52x21x16cm.
Buscador es tal vez la obra más surrealista de esta colección; su aspecto general nos recuerda la ilustración más difundida de El Principito de Saint-Exupéry. Una vasija de vidrio invertida de color azulado lleva adheridos, mediante una retícula de alambre, trozos de latas oxidadas; el conjunto es semejante a un extraño y diminuto planeta sobre el que se yergue una figura desproporcionada para ese mundo, cuya cabeza contiene una brújula. Esa desproporción de la figura respecto al suelo que pisa es lo que más asemeja la obra al planeta de El Principito.
En Buscador llama nuestra atención la textura y color del vidrio en contraste con los que presentan los alambres y las latas machacadas y oxidadas que cubren su superficie a modo de continentes. Pero más sorprendente es la figura del caminante, con su anatomía de gigante, parado en actitud indecisa, como desorientado, pese a ser su cabeza un instrumento preciso de orientación, de búsqueda. Quizás en su indecisión esté recordando esta frase de Saint-Exupéry: “Caminando en línea recta no puede uno llegar muy lejos”, o tal vez ha sido sorprendido al comenzar una jornada y piensa en esta otra del mismo autor: “Es una cuestión de disciplina…. Cuando por la mañana uno termina de arreglarse, hay que hacer cuidadosamente la limpieza del planeta”.